«Por qué fracasan los países» es un libro escrito por Daron Acemoglu y James A. Robinson que se ha convertido en una obra de referencia para entender el desarrollo económico y político de las naciones. Publicado en 2012, el libro explora las razones detrás de la riqueza y la pobreza en diferentes países, desafiando teorías tradicionales y aportando una perspectiva innovadora y fundamentada.
A continuación, se detallan los aspectos más importantes del libro, desglosando sus argumentos y explicando por qué algunas naciones prosperan mientras que otras se quedan atrás.
- Acemoglu, Daron
- Robinson, James A.
- García Madera, Marta
Las Instituciones: El Motor del Desarrollo Económico
El eje central de la tesis de Por Qué Fracasan los Países de Acemoglu y Robinson es que el éxito económico de un país depende de la calidad de sus instituciones. Los autores argumentan que existen dos tipos de instituciones políticas y económicas: inclusivas y extractivas. Esta dicotomía es fundamental para entender por qué algunos países se desarrollan mientras que otros se estancan en la pobreza.
Instituciones inclusivas son aquellas que fomentan la participación de la mayoría de la población en la economía. Garantizan derechos de propiedad, promueven la competencia, la innovación y permiten que las personas se beneficien de su esfuerzo y creatividad. Estas instituciones crean un entorno propicio para el crecimiento económico sostenible. Por ejemplo, en países como Estados Unidos, Canadá y Japón, las instituciones inclusivas han permitido el surgimiento de economías prósperas y diversificadas.
Por otro lado, las instituciones extractivas limitan el acceso de la mayoría a la actividad económica, concentrando el poder y los beneficios en manos de una élite. Estas instituciones suelen ser dictatoriales y coartan la innovación y el crecimiento al proteger los intereses de unos pocos. Países como Corea del Norte, Zimbabue y Venezuela son ejemplos donde las instituciones extractivas han llevado a un estancamiento económico crónico.
Teorías Alternativas Rechazadas por los Autores
Acemoglu y Robinson dedican una parte considerable del libro a refutar otras teorías comunes sobre el desarrollo económico. Una de estas es la teoría geográfica, que sostiene que las condiciones naturales, como el clima y la ubicación, determinan la prosperidad de las naciones. Según esta teoría, los países tropicales tienen desventajas inherentes en comparación con los países de climas templados. Sin embargo, los autores argumentan que hay demasiados ejemplos que contradicen esta visión simplista. Singapur, por ejemplo, es un país tropical que ha logrado un desarrollo económico impresionante gracias a la creación de instituciones inclusivas.
Otra teoría que los autores de Por Qué Fracasan los Países rechazan es la teoría cultural, que atribuye el éxito económico de las naciones a las características culturales de sus poblaciones. Esta teoría sugiere que la ética del trabajo, la religión o las costumbres de un pueblo determinan su desarrollo económico. Acemoglu y Robinson argumentan que, aunque la cultura puede influir en el comportamiento económico, no es suficiente para explicar por qué algunos países son ricos y otros pobres. De hecho, países con culturas similares pueden tener trayectorias económicas completamente diferentes dependiendo de sus instituciones.
Finalmente, los autores critican la teoría de la ignorancia, que sugiere que los países fracasan porque sus líderes simplemente no saben qué hacer para generar crecimiento económico. Esta perspectiva no toma en cuenta que, en muchos casos, los líderes sí saben qué se necesita para el desarrollo, pero eligen políticas que benefician sus intereses personales a costa del bien común. Es aquí donde la estructura institucional juega un papel crucial.

El Papel del Poder Político en la Economía
Una de las contribuciones más importantes del libro es la relación que los autores establecen entre el poder político y el desarrollo económico. Según Acemoglu y Robinson, la distribución del poder político en un país determina la naturaleza de sus instituciones económicas. Si el poder está concentrado en manos de una élite, es probable que las instituciones sean extractivas, ya que aquellos en el poder diseñarán sistemas que les permitan mantener su posición privilegiada. Sin embargo, si el poder está distribuido de manera más equitativa y las instituciones son inclusivas, se facilita un entorno donde el crecimiento económico puede prosperar.
Los autores destacan que para que un país tenga éxito, necesita instituciones políticas inclusivas que permitan la rendición de cuentas, la alternancia en el poder y el respeto a las libertades individuales. Sin estos elementos, las instituciones económicas no podrán funcionar de manera inclusiva, y el desarrollo a largo plazo se verá comprometido. Ejemplos históricos como la Revolución Gloriosa en Inglaterra y la independencia de Estados Unidos muestran cómo cambios en el poder político dieron lugar a la creación de instituciones inclusivas que favorecieron el crecimiento económico.
La Importancia de los “Momentos Críticos” en la Historia
Un concepto clave introducido en el libro es el de “momentos críticos” (o critical junctures), que son eventos históricos que tienen el poder de cambiar radicalmente la trayectoria de las naciones. Estos momentos pueden crear oportunidades para que las instituciones cambien de extractivas a inclusivas, o viceversa. Por ejemplo, la Revolución Industrial en Europa Occidental fue un momento crítico que permitió la expansión de las instituciones inclusivas, lo que a su vez impulsó el desarrollo económico en países como Gran Bretaña y Estados Unidos.
Sin embargo, los autores también explican que no todos los países aprovechan estos momentos críticos de la misma manera. En algunos casos, las élites en el poder logran adaptarse a los cambios para mantener sus privilegios, bloqueando el desarrollo de instituciones inclusivas. Esto explica por qué, por ejemplo, mientras Estados Unidos adoptó una estructura política que favoreció el crecimiento económico tras su independencia, otros países en América Latina no lograron hacer la transición hacia instituciones inclusivas tras sus respectivas independencias.
El Papel de la Historia y el Contexto en el Desarrollo Económico
Acemoglu y Robinson en Por Qué Fracasan los Países resaltan la importancia de la historia y el contexto en el desarrollo de las instituciones. Las naciones no comienzan desde un punto cero; las estructuras políticas y económicas actuales están moldeadas por decisiones y eventos pasados. Por eso, la historia colonial de muchos países sigue influyendo en su desarrollo actual. En regiones como África y América Latina, las instituciones extractivas establecidas durante la época colonial han perdurado, afectando negativamente el crecimiento económico hasta el día de hoy.
Un aspecto interesante que mencionan los autores es el “círculo vicioso” de las instituciones extractivas. Cuando estas instituciones existen, tienden a perpetuarse porque aquellos que se benefician de ellas tienen incentivos para mantener el statu quo. Esto hace que sea extremadamente difícil para los países escapar de la trampa de la pobreza, incluso cuando se presentan oportunidades para el cambio.