Sales de la Universidad. Has estudiado un grado en Economía, Administración y Dirección de Empresas, International Business, una ingeniería o lo que quieras. Cuatro años de dedicación profunda para esto. O no tan profunda. Pero sales y piensas que te vas a comer el mundo.
Has aplicado a diferentes compañías de alto prestigio; Private Equity, Investment Banking, grandes y enormes consultoras, Corporate Finance. No te queda nada para rascar y te llaman de una. ¡Suerte! Te han hecho oferta de trabajo.
Se lo comunicas a tu familia y sales corriendo a buscar un par de trajes. Mínimo de 500€, ya sabes. Harvey Specter así lo decía. Zapatos italianos de la mejor piel posible. El cinturón, del mismo material. Te has cogido cuatro corbatas de diferentes colores y has avanzado un salario mensual para adquirir un reloj que hará brillar tu muñeca impoluta.
Llega el día. Entras en la oficina tambaleando pero con la cabeza erguida, no vaya a ser que se den cuenta que estás nervioso. Te dan tu ordenador y te sientas delante de él. Abres Windows, se te da muy bien hacer esto. No ha pasado ni medio día cuando el Senior de turno te pide que le trates una base de datos que contiene diez archivos Excel diferentes, le cruces los datos con la fuente original, le mapees las cuentas contables, y le extraigas el EBITDA calculado. Tú has asentido con la cabeza mientras desviabas la mirada, pero las gotas de sudor te han resbalado por la mejilla y se han impregnado en la solapa de tu traje Emporio Armani. No has entendido nada de lo que te ha pedido ni sabes cómo ponerte a ello.
Y no es culpa tuya. Has dedicado cuatro años a sacarte una carrera y no te han enseñado nada de Excel, la cual es una herramienta básica para trabajar en este sector. Sabes hacer sumas, decorar tablas y darle un formato exquisito a las celdas para que queden muy chulas. Pero no sabes nada más.
En este punto estamos. Y nos hemos dado cuenta gracias a las redes sociales. Resulta que en X todo el mundo tiene el mejor trabajo del mundo, salarios desorbitados, puestos de alto ejecutivo en el primer año de carrera profesional, y una alfombra roja bajo los pies cada vez que entran en la oficina. Pero luego se discuten en esta misma red social por un plantilla en Excel de control de gastos e ingresos personales, o por si esta fórmula que me estás diciendo yo la sé hacer mejor. Y esto solo trae a una conclusión: muchos jóvenes no tienen ni la pajolera idea de como funciona Excel.
Y lo siento decirlo así, pero es la realidad. Todos hemos estado en este punto, pero varios años de carrera profesional en el sector te curten más que cualquier Máster o Mega Cursillo de Excel.
En este sentido, vemos la necesidad de enseñar Excel útil, fácil, sencillo y rápido (creo que no me dejo ningún adjetivo) a jóvenes profesionales financieros, a perfiles más curtidos e incluso a curiosos que quieran aprender.
Si eres uno de estos perfiles (y si no, pues también), entra en nuestro canal de YouTube y síguenos, ya que vamos a estar subiendo videos muy cortos pero muy explicativos y rápidos de entender para que aprendas a usar Excel por tu cuenta.
De nada.
De esta forma, cuando te venga el Senior y te pida todo lo anterior, le podrás responder con una sonrisa picarona y quedará impresionado en el momento en el que le devuelvas el EBITDA calculado con todos los procesos estrictamente realizados y ordenados en el menor tiempo que lo hubiera hecho él.